Es posible y normal que puedas sentir confusión al respecto. Definir la orientación sexual, es decir si sientes atracción por alguien de tu mismo sexo (homosexual), del sexo contrario (heterosexual) o por ambos sexos (bisexual) a veces toma tiempo. En la medida que vayas conociéndote mejor, se aclarará. Lo importante es que recuerdes que cualquiera de las tres alternativas está bien.
Algunas cosas pueden ayudarte a conocerte mejor:
Tus reacciones:
Cuando ves chicas o chicos con ropa ajustada, o sexy, ¿te quedas mirando o te da más nervios un hombre, mujer o ambos? O por ejemplo, ¿Si estás en un camarín, sientes más incomodidad que la mayoría al desvestirte o te dan ganas de quedarte mirándoles?
Tus afectos:
¿Estás sintiendo algo realmente especial por una chico o chica, alguien que mantenga tu cabeza ocupada todo el día y con quién quieras pasar el tiempo? Si te ha pasado esto otras veces ¿Ha sido con un hombre, mujer o te ha pasado con ambos?
Tus fantasías:
Cuando estás pensando en besar o tocar a alguien ¿Aparece un hombre, una mujer o ambos en tu imaginación?
La respuesta de tu cuerpo:
Desde la adolescencia tu cuerpo también comienza a responder a tus fantasías o a las personas que te resultan atractivas. Puede que sientas sensaciones físicas nuevas en tus zonas íntimas ¿Cuándo te pasa esto, es ante la proximidad de un hombre, una mujer o ambos?
Conversemos sobre lo que te sucede, desahógate y busca contención en nuestros psicólogos y psicólogas de Línea Libre, son profesionales y pueden ayudarte a contener lo que sientes.
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